Autor: Mariano Fain
El 21 de agosto de 1862 nació en la ciudad de Verona, Italia, el escritor Emilio Salgari.
Hijo de comerciantes acomodados, ingresó en el Instituto Técnico Naval Paolo Sarpi de Venecia, pero no pudo obtener el título de capitán. Pese a su escasa experiencia marítima, sus obras están pobladas de héroes y villanos de altamar, inspirados en anécdotas y leyendas que le contaban sus amigos marineros.
Mientras escribía artículos para el periódico veronés La Nuova Arena, a mediados de 1883 publicó el relato breve «Los salvajes de Papuasia». Poco después dio un gran salto con la publicación de El tigre de la Malasia, la primera versión de la saga de Sandokán, y la novela La favorita del Mahdi.
El éxito de sus publicaciones le permitió firmar un beneficioso contrato con La Nuova Arena. Una tras otra, sus novelas se convertían en grandes éxitos de ventas.
En 1889 se suicida su padre, hecho que afectó la personalidad de Emilio. En 1892 se casó con Aida Peruzzi, con quien tuvo 4 hijos, pero una enfermedad psiquiátrica de Aida le generaba malestar. Cambió de editoriales según los contratos, desde Speirani, de Turín, hasta Donath, de Génova, siempre con gran éxito.
En 1900 conoció al dibujante Giuseppe Gamba, que se convirtió en el ilustrador de sus novelas posteriores. Su último contrato fue con la editora Bemporad, especializada en novelas juveniles, donde llegó a vender 100 mil ejemplares de cada título.
Con su esposa internada en un psiquiátrico, Salgari sufría trastornos mentales. En 1909 intentó suicidarse sin éxito, pero el 25 de abril de 1911 lo logró en Turín, clavándose una espada al estilo samurái.
El suicidio era un estigma familiar, ya lo había hecho su padre y posteriormente sus hijos Romero y Omar también se suicidarían.
Su legado son 84 novelas y decenas de relatos ambientados en lugares exóticos, con títulos como Sandokán, el tigre de la Malasia, El corsario negro, Los últimos filibusteros, El león de Damasco y El capitán del Djumna.