¿Cuál es el origen del dinero?


Autor: Felipe Pigna

En un principio los hombres utilizaban el trueque como forma de intercambio de productos o servicios; es decir, que canjeaban cosas u horas de trabajo por otras cosas o tareas que necesitaban para sus vidas. Pero esto no era siempre posible porque a veces los dos tenían lo mismo para ofrecerse y entonces no había trueque que valiera. Fue entonces que a alguien, nunca sabremos a quien, se le ocurrió simbolizar el valor de las cosas en un objeto que podía ser un caracol, cabezas de ganado, bolsitas de sal (de ahí la palabra «salario») o esclavos como forma de pago.

¿Cómo eran las primeras monedas? 
Las monedas chinas -que son las más antiguas que se conocen y datan del 1100 a.C.- eran copias en bronce de las herramientas que antes se cambiaban por mercancías. La moneda-cuchillo de bronce, por ejemplo, era demasiado delicada como para usarse como herramienta y sólo servía como moneda. Pero las primeras monedas hechas con una aleación de oro y plata aparecieron en Lidia (Asia Menor), que por aquel entonces formaba parte del mundo griego (Asia Menor) en el Siglo VIII a.C. Con el tiempo, cada ciudad griega tuvo su propia moneda, menos Esparta, que seguía utilizando barras de hierro como elemento de cambio.

¿Cuál fue la moneda más rica? 
El cacao, que además de para preparar su sabroso invento, el chocolatl, era utilizado por los aztecas como medio de pago. Parece que era un problema mandar a los chicos a hacer los mandados: muchos se quedaban con el vuelto en la panza.

¿Cuál fue la moneda más popular de la antigüedad? 
La ateniense, que fue difundida por comerciantes y soldados griegos por todo el mundo antiguo. En los países con los que los griegos comerciaban llamaban a sus monedas «pequeñas lechuzas». La lechuza que venía acuñada en las monedas era el símbolo de Atenea, la diosa de la sabiduría, que, al igual que Zeus, podía lanzar terribles rayos en defensa de una causa justa. Estas monedas se hicieron tan populares que muchos países las copiaron e hicieron las suyas con diseños muy parecidos.

¿Cara o ceca? 
Filipo, rey de Macedonia, unificó toda Grecia y creyó conveniente emitir una sola moneda, eliminando las de cada ciudad. Para que no quedara ninguna duda sobre quién mandaba, mandó acuñar su cara en las monedas. Su hijo, Alejandro Magno, siguió su ejemplo y al ritmo de sus conquistas, impuso la costumbre. A partir de allí todos los reyes querían ver sus caras en las monedas. Esta era prácticamente la única oportunidad que tenían los romanos de conocerle la cara al emperador. Pero esto no le garantizaba al mandatario su perpetuación en la historia. Cuenta el historiador romano Suetonio que a la muerte del emperador Calígula, todas las monedas con su efigie fueron fundidas y reutilizadas para que se olvidara el rostro del tirano.

¿Quién fue el primer falsificador de dinero? 
Polícrates, un gobernante de la ciudad griega de Samos que en el 540 antes de Cristo estafó a los espartanos con monedas de oro falsas. Polícrates hizo escuela y muchos lo imitaron. Algunos reyes reducían la cantidad de oro o plata en sus monedas mezclándolos con otros metales engañando a sus súbditos y quedándose con la diferencia.

¿Cuándo aparece el papel moneda? 
Los chinos fueron los primeros. Ya en el siglo IX d.C., durante la dinastía Tang, aparecieron los primeros bancos en los que la gente depositaba sus monedas y a cambio se le extendía un certificado por el importe depositado que servía como medio de pago. Así la gente no tenía que movilizarse con las pesadas piezas de plata. Hay, sin embargo, quienes sostienen que los primeros billetes comenzaron a circular en China hacia el siglo VII. En Occidente recién en 1661 comenzó a utilizarse en Suecia este sistema de forma regular, aunque algunos investigadores sostienen que ya en el siglo XV circulaba papel moneda en algunas regiones de la península ibérica.

Fuente: www.elhistoriador.com.ar